Cuando Chara Dionysiou vio que una de sus compañeras de equipo y una rival chocaban sus cabezas, actuó de inmediato. Como enfermera profesional, la jugadora de 23 años del club chipriota AEZ Chrysomilia atendió a ambas futbolistas. Dionysiou opina que prestar asistencia médica no es tarea de una jugadora, opinión que comparten la Asociación Chipriota de Futbolistas Profesionales (PASP) y FIFPRO.
Por Chara Dionysiou
En nuestro partido contra el Aris, vi que mi compañera Evangelia Papachristodoulou y una jugadora rival, Maria Savva, disputaban un remate de cabeza y chocaban con sus cabezas. Antes de que cayeran al suelo, ya podía ver la sangre. Fue algo espontáneo correr a ayudar, pero es lo que hago en la vida: ayudar a la gente. Y no importa si María jugaba en el equipo contrario.
Soy enfermera de quirófano en el Centro Alemán de Oncología de Limassol. Sin pensármelo dos veces, tuve que detener la hemorragia. Limpié la herida con agua y luego empecé a ejercer presión sobre sus heridas hasta que se detuvo la hemorragia. Después apliqué una gasa limpia y envolví la herida con una venda.
Para Evangelia fue fácil. María, sin embargo, tenía una herida profunda muy grave; nunca había visto nada igual durante un partido. Por un momento me preocupé, porque no había suficientes gasas en el botiquín de campo, pero por suerte el personal médico de ambos equipos tenía más. Tardé entre tres y cinco minutos en ayudarla.
El médico del partido estaba a mi lado mientras yo prestaba los primeros auxilios. Sé que el entrenador y los fisioterapeutas también sabían prestar primeros auxilios, pero yo tengo más experiencia debido a mi profesión. Estuve ansiosa hasta que se detuvo la hemorragia. Mi mente no estaba en el partido, sino en cuándo llegaría la ambulancia al estadio.
También hubo cierta confusión y tardaron en llamar a una ambulancia. Mientras curaba las heridas, oí las conversaciones y les grité que llamaran a una inmediatamente. Afortunadamente, el gran hospital público de Limassol está cerca del estadio. Pero la ambulancia tardó al menos 15 minutos en llegar.
Sé que es difícil tener una ambulancia en cada estadio de cada deporte. Pero si es obligatorio en la Primera División masculina, también debería serlo en la Primera División femenina. Creo que es inaceptable empezar un partido sin la presencia de una ambulancia.
Los incidentes graves, como un paro cardiaco, no distinguen edad, sexo ni estadio. ¿Qué hacemos si tenemos que atender una emergencia? ¿Llevamos a la jugadora al hospital? Si los partidos de la Primera División masculina no empiezan sin la presencia de una ambulancia, ¿por qué no ocurre lo mismo en la Primera División femenina?
Otra solución sería disponer de un protocolo pertinente para hacer frente a este tipo de incidentes. Por ejemplo, antes de cada partido, debería designarse el centro médico más cercano y un responsable debería ponerse en contacto con él para que haya un plan claro y un procedimiento fácil para la llegada de la ambulancia al estadio.
Sólo se debería permitir inscribirse como médico de partidos a quienes tengan formación y experiencia en el tratamiento de lesiones. Actualmente hay médicos que, por ejemplo, solo tienen experiencia examinando a personas en una consulta.
También creo que, de la plantilla de cada equipo, un par de personas deberían recibir formación para ofrecer apoyo durante este tipo de incidentes. Nuestro sindicato de jugadores, por ejemplo, ofrece cada año a entre 50 y 100 jugadores formación gratuita para obtener un diploma de primeros auxilios. María era una de las jugadoras que había superado esta formación y tenía un diploma de primeros auxilios. Esto me ayudó mucho cuando la atendí, ya que entendía lo que estaba pasando.
Fútbol femenino y asistencia médica
Las encuestas realizadas tanto por el sindicato chipriota de jugadores como por FIFPRO Europa muestran que no existe una normativa uniforme que defina la presencia de una ambulancia u otras formas de asistencia médica en el fútbol femenino profesional.
El número de países en los que es obligatoria la presencia de una ambulancia durante los partidos de la primera división femenina es casi igual al número de países en los que esta presencia no es obligatoria. Algunos países sólo exigen la presencia de un médico o de un botiquín de primeros auxilios en el lugar del encuentro, mientras que otros, por ejemplo en Escocia, establecen que sólo es necesaria una ambulancia en los partidos con una afluencia de público prevista de al menos 5.000 espectadores.
"Necesitamos contar con los protocolos y las disposiciones adecuadas para que la ayuda médica experta esté fácilmente disponible para las jugadoras en caso de que surja cualquier tipo de necesidad o emergencia. Como mínimo, esto debe estar disponible en todos los partidos de fútbol femenino profesional", afirmó Sarah Gregorius, directora de Política Global y Relaciones Estratégicas del Fútbol Femenino de FIFPRO.
