Futbolistas uruguayos cobran deuda tras 13 años: “La ayuda de FIFPRO fue invalorable”

• El club iraní Bargh Shiraz mantenía una deuda desde la temporada 2011-2012 con Martín Barlocco y Michel Acosta
• Pese a las sanciones impuestas por la FIFA, solicitadas por FIFPRO, el club no había efectivizado los pagos y había dejado de competir oficialmente
• Nuevos dueños se hicieron cargo del Bargh Shiraz en julio de 2025 y FIFPRO logró llegar a un acuerdo con ellos para la resolución de ambos casos 

La perseverancia en el reclamo del pago de deudas a futbolistas tiene premio y los uruguayos Martín Barlocco y Michel Acosta son buenos ejemplos del éxito de no dejar de pelear por lo que corresponde. 

Con la representación de FIFPRO, ambos jugadores llegaron recientemente a un acuerdo con el club iraní Bargh Shiraz, que mantuvo una deuda con ellos durante 13 años por sus contratos de la temporada 2011-2012. 

“Me quedaron debiendo el 50% del total de lo acordado por esa temporada”, le cuenta Barlocco a FIFPRO.org. “Ahora en la negociación pudimos llegar a un acuerdo en el que se logró recuperar un porcentaje de esa deuda que le sirvió a las dos partes. Estoy más que conforme porque la verdad ya habían pasado muchos años y uno veía lejana la posibilidad de cobrar. Siempre con alguna esperanza pero, cuanto más tiempo pasaba, menor la esperanza”. 

El arquero uruguayo jugó cinco años en Irán y tres en el Bargh Shiraz, el último en el curso 2011-2012. Al no recibir los pagos prometidos, decidió acudir a la FIFA, que decidió en su favor. FIFPRO intentó ejecutar la decisión en reiteradas oportunidades y FIFA le impuso al club varias sanciones. El Bargh Shiraz dejó de competir oficialmente sin haber honrado sus deudas. 

“La ayuda de FIFPRO todo este tiempo fue invalorable. Alexandra [Gómez Bruinewoud, directora jurídica de FIFPRO] agarró mi caso con una gran disposición y un gran trabajo,  luego de que la Mutual Uruguaya (MUFP) ganara en principio el reclamo contra el club en FIFA y posteriormente con el seguimiento, con la imposición de sanciones hacia el club cuando el club no estaba dispuesto a pagar”, asegura Barlocco.

“Lamentablemente, después pasó un período muy largo de tiempo en el que el club dejó de competir, pero siempre se mantuvo la comunicación con los abogados de FIFPRO para que no se cerrara el caso y estar pendientes todos de que ante algún mínimo movimiento de este club supiera que tenía que cumplir con sus obligaciones, si no les iba a ser imposible jugar”. 

Y ese movimiento llegó a comienzos de julio, cuando el Bargh Shiraz presentó en su cuenta de Instagram a sus nuevos dueños y manifestó su intención de cancelar viejas deudas como parte del proceso para volver a participar del fútbol iraní. El departamento legal de FIFPRO se puso en contacto para negociar un pago para Barlocco y también para Acosta, que acudió a FIFPRO en 2023.

"En el caso de Acosta, cuando FIFPRO intentó comenzar un procedimiento disciplinario contra el club, obtuvo una carta de FIFA estableciendo que no podían imponer sanciones ya que habían pasado más de 5 años desde la decisión de la CRD de la FIFA, de 2015, sin que se hubiese comenzado un procedimiento disciplinario antes", explica Gómez Bruinewoud.

"Finalmente, también pudo cobrar, pero esto sirve de recordatorio a todos los y las futbolistas de que no dejen estar sus procedimientos. Siempre hay que dar seguimiento, preferiblemente de la mano de su gremio de FIFPRO, que además lo hacen de forma gratuita.

En el lapso de pocos días, el club anunció a través de sus redes sociales el acuerdo de pago alcanzado con ambos.

“Como reflexión, en este tipo de casos, cuando un club no paga lo que tiene que pagar, sobre todo a un jugador que está lejos de su familia, lejos de su país, no hay que bajar los brazos y obviamente hay que acudir a FIFPRO para tener la ayuda y el acompañamiento para que, en la medida de lo posible a corto, mediano o largo plazo, los jugadores puedan tener su dinero”, afirma Barocco. 

“Realmente tengo un agradecimiento con mayúsculas hacia todo el equipo legal. La verdad que desde un primer momento siempre tuvieron una tremenda disposición en todo. En lo humano, en lo legal... Así que palabras mayores para quienes hicieron todo lo posible y estuvieron siempre al tanto. Fue impecable cómo pudieron resolver la situación”. 

El arquero, de 47 años y actualmente trabajando como entrenador de arqueros en el Rocha FC de la Segunda División de Uruguay, en el que el año pasado se retiró como futbolista profesional, también quiso destacar “el cariño especial” que siente por el Bargh Shiraz, “uno de los clubes más antiguos de Irán”.  

“Es un club muy lindo al que quiero mucho, con gente maravillosa y compañeros con los que sigo en contacto. No es que no me pagaron a mí, no le pagaron a nadie en esos últimos años. Ni al utilero. Ese año hubo un cambio de dirigencia y empezó una caída que llevó al club a no competir más por mucho tiempo. Me pone muy contento la llegada de esta nueva dirigencia. Ojalá que el club vuelva a competir a muy buen nivel”.